martes, 5 de septiembre de 2017

Jose Manuel Falcón

Jose Manuel Falcon fue un chico que nació el mismo año que yo , lo que quiere decir que sus años de niñez en Urrea los pase con él.
Me manda Ramon Martín un escrito  que narra su biografía, biografía que pongo debajo y que yo  no me voy a meter con ella pues la podéis leer después, lo que si contare una anécdota que Falcón comento en su libro, Los Animales de mi pueblo, y  que en días venideros pondré algún trozo de este libro que por supuesto me he leído un par de veces.
Un dia fuimos a plantar cepos para coger pájaros , aun recuerdo donde fue, por detrás del huerto mío que tengo en la cuesta del río, no pusimos mas que media docena de cepos, cuando dimos vuelta por ellos en uno había caído un ruiseñor,Falcón lo cogió entre sus manos inerte , sin vida , y nos dijo esto no esta bien , no se puede acabar con la vida de los animales de esta manera, con lo cual nos hizo recoger los cepos y ya no fuimos nunca mas  con él a esto que tanta gente mayor se dedicaba por aquellos años, con lo que quiero decir que ya desde muy pequeño, tendríamos unos ocho años , Falcon  ya se desvivía por los animales.
También me manda Ramón  unas fotos  del propio Falcón , de su familia y de su hijo, que parece tiene mucho de su padre con los animales.
Muchos días me acuerdo de Jose Manuel Falcón .        
Os dejo con el reportaje.                                                                      Toño


JOSE MANUEL FALCON, URREANO DE CORAZON Y PIONERO DEL MOVIMIENTO ECOLOGISTA
José Manuel Falcón  Martín  nació en Zaragoza en 1955 y fue criado en Urrea, en los montes de la Chumilla, por haber fallecido su madre en el momento del parto. En los círculos aragoneses siempre se  le ha considerado como un pionero del movimiento ecologista aragonés y un hombre socialmente comprometido, que destacó en la política y en la lucha por los derechos de los discapacitados. Faceta está última que emprendió como afectado de esclerosis múltiple  y que tras luchar contra ella durante más de dos décadas, le produjo la muerte antes de cumplir los 50 años.
Emigró a la ciudad de Cuenca (Ecuador) buscando un lugar de clima primaveral que le permitiera mejorar su estado de salud y allí encontró una nueva familia. Poco después de llegar se casó con Ruth Reibán, psicóloga de formación y una de sus cuidadoras, con quien compartió doce años y dos hijos: María Fernanda, que hoy ejerce como médico en la ciudad de Zaragoza y José Manuel, estudiante de Biología en  Ecuador. Vivía en su casa con un pequeño zoo, porque adoraba los animales y un  huerto lleno de verduras españolas.
Falcón había recibido numerosos premios, entre ellos, el de la Asociación de Esclerosis Múltiple de Aragón y el de la Fundación Ecología y Desarrollo (1998). En el año 2014 la Sociedad Herpetológica Aragonesa creó el Premio José Manuel Falcón al mérito en Herpetología. (Entendida ésta como la parte de la zoología que describe y estudia los reptiles). Antes de contraer la enfermedad Falcón era un gran escalador y montañero. También fue uno de los fundadores de Ansar (Asociación Naturalista de Aragón) y de la Asociación Protectora de Animales.Fue autor de varios libros sobre naturaleza: Guía ecológica de Aragón para escolares (1982), Los anfibios y reptiles de Aragón y  Los animales de mi pueblo.
 Murió en la ciudad de Cuenca (Ecuador) en el año 2003 y sus cenizas reposan a los pies de la sabina de Villamayor, tal como pidió a su familia y amigos, donde inició su campaña electoral de IU al Senado junto a Javier Delgado  en 1986.
Fruto de su matrimonio con Ruth nació su hijo José Manuel, hoy estudiante de Biología en  la Universidad de Cuenca (Ecuador) y un gran amante de los animales, que posiblemente dejaría atrás a su padre en estos momentos, como atestiguan algunas de las imágenes que presentamos.
José Manuel Falcón en 1995 escribió un simpático libro titulado Los animales de mi pueblo que fue editado en 1995 en los Cuadernos de Aragón de la Institución Fernando el Católico, y luego reeditado en 2004. Es un libro delicioso en el que José Manuel, todavía un niño de 12 años, pasó su primer verano en Urrea y fue capaz de entusiasmarse y vivir cualquier manifestación de la tierra por pequeña que esta fuera. Por primera vez, y de la mano de sus nuevos amigos del pueblo y de los componentes de un campo de trabajo en el poblado ibérico del Ventanico, José Manuel se topó con la inmensidad y la sorpresa de la naturaleza y de la historia, cosa que él conocía bastante bien por sus lecturas, pero que en este preciso momento se le brindaba en directo. Es curioso contemplar desde su mirada infantil y urbanita, cómo él vive  e interpreta la primera Semana Santa y las fiestas patronales de Urrea y lo que implica el vivir el día a día en un pequeño pueblo, que él considera como propio. La lectura de este delicioso libro, además de su gran amenidad y agudeza, puede ser un referente para todos aquellos niños y jóvenes que no han tenido el privilegio de haber pasado su niñez en un pueblo, donde el contacto con la naturaleza, la familia y los amigos abre un mundo nuevo de experiencias vitales.

Ramon Martin Rodrigo
                                                    Falcón en Gallocanta

Falcon y su familia

                               
                                                 Un paseo por Cuenca (Ecuador)


                              La sabina de Villamayor, donde están esparcidas las cenizas de Falcón

                                                      Falcón Jr amigos de los animales


                                                     Falcón ante una tarantula

                                                          Falcón con una serpiente

                                                       La caricia de una lagartija

9 comentarios:

  1. Muy interesante
    Me ha gustado mucho

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  2. Respuestas
    1. Toda una sorpresa. No se valora en los pueblos la cantidad de universitarios que tenemos. Fantástico.

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    2. claro que se valora la intelectualidad en los pueblos, la Universidad aporta una serie de conocimientos, lo que es mas difícil es que los universitarios valoren el conocimiento popular, el que da la vida, la experiencia, la sabiduría de lo rural, Unamuno decía "que sabiduría la de mi pastor, no sabe leer ni escribir pero como corta el pan", o aquel párrafo de Don Quijote: "que afortunada vida la que huye del mundanal ruido y sigue por la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que el mundo han sido", en una sociedad donde los valores son el dinero, la popularidad, el poder sobre los demás,poco importa el conocimiento, esa es la triste realidad, que puede hacer contra esto el universitario?, poner su conocimiento al servicio de la verdad, de la autentica sabiduría que no siempre es aquella que da los libros, todos conocemos a personajes con títulos y son unos auténticos cafres y por contra, hay personas que justo les viene para resolver un problema matemático sencillo y sin embargo nos pueden y nos están dando lecciones de sabiduría de la vida

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    3. Corrijo la autoría de "que afortunada vida" , es "que descansada vida..." y es de Fray Luis de León, no de Cervantes, con esta corrección pongo en evidencia mi desconocimiento histórica sobre literatura, el no ser universitario trae estas confusiones, pero alguien dijo "lo poco que se es lo que se, pero me olvide de quien lo supo"

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  3. Gracias, Ramón, por recordarnos a José Manuel. Gran persona y defensor y luchador por la vida en todos los sentidos.
    Es un personaje importante en la historia de nuestro pueblo y de Aragón.
    El libro "Los animales de mi pueblo" es una gozada tanto para chicos como mayores.

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  4. Interesante reportaje.Estupendo poder recordar o dar a conocer a José Manuel y sus aportaciones sobre los animales y la naturaleza.

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  5. Gracias por ese homenaje a mi padre y a mi hermano..

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