Recuerdos de mi niñez, Semana Santa

Para Romper la Hora , cuando éramos muy pequeños,  nos dejaban en casa pero cuando ya teníamos unos años para poder aguantar un rato íbamos con nuestros padres, que después de Romper la Hora iban de casa en casa comiendo torta con   chocolate, ellos alguna bebida de casa y nosotros bebíamos agua. Aún recuerdo un par de años donde yo acompañaba a la cuadrilla que iba mi padre y que comimos a mitad de noche, en La Maravilla, una bacalada, como ellos la llamaban y así hasta que el cuerpo aguantara.

Pero había que ir a dormir un rato para estar descansado para las procesiones. Cuando ya me hice más mayor me independice de  la cuadrilla de mi padre, al formar cuadrilla con mis amigos. No nos echábamos a dormir en toda la noche y así aguantábamos (algunos) todo el día siguiente hasta la procesión del Entierro que acababa a las 11 de de la noche. Aunque acababas muerto, así estuve muchos años.

Luego por el día nos juntábamos una cuadrilla de chicos e íbamos dando vueltas al pueblo, a veces recuerdo ir solos el Joaquín “El Perdigón” y yo solos tocando.