EL JOSE EL CHIRON
El Jose el”Chiron” era uno
de las personas que en mi juventud pasábamos pinchandole un poco para
pasarnoslo un rato bien , no era muy normal de entendederas , pero no era tonto
del todo , persona un poco alocada , que con sus gritos hacia pasar un buen rato
a los que lo provocaban, pero que al final siempre
quedaba amigo con el sobre todo si le pagabas algún vino por la Maravilla que
es por donde salía él a la tardada.
Uno de los que mas lo
provocaba era el Emiliano “El Corona” siempre estaba provocandolo y se reía con el a lo que “El Chiron” le
decía pegandole con el envés de la mano
en la cabeza:¡Emiliano que le diré a tu padre que te ríes de mi con el
cucucu...
De mas pequeños cuando lo
veíamos por la calle los chicos lo llamábamos “Lobico” cosa que le enfadaba
mucho y nos encorria hasta que se cansaba.
Como ya he dicho antes a la
tardada después de llevar una punta de ganado pequeña que tenia el “Borrajas”,
acudía por la Maravilla cuando el bar aun lo llevaba “El Francisquillo” y allí
alrededor de la estufa de serrín en invierno se ponía a calentarse, siempre
había quien lo provocaba y se ponía de muy mal genio , cuando estaba con mas
mal genio, decías Francisco sacale un vino al José, la cara le cambiaba
radicalmente y se ponía a reírse y a pasarte la mano por la cabeza.
Siempre venia muy mal
afeitado, hay que decir que no estaba muy bien de la cabeza y que vivía solo en
una casa, llevaba barba de una semana o dos y entonces siempre había quien le
decía ¡Jose mira a ver si te afeitas! a lo que él siempre respondía ¡Que corra
la bola!.
Seguro que habrá muchas mas
pero voy a contar la ultima.
Cuando se fue haciendo mayor
y cada vez iba peor vestido y arreglado, los hermanos de San Juan de Dios de
Urrea el padre Matias, Ramon Martin, Miguel Martin y Benjamin
intervinieron para poder llevaserlo a un asilo de ellos y aun que el no quería
irse al final se lo llevaron a San Baudilio de LLobregat a una residencia con
monjas,yo de vez en cuando le preguntaba a Ramon que era el que estaba por allí
con él y me decía:¡Lo lleva muy mal sobre todo cuando lo duchan no quiere
ducharse ,y ademas me dice que las monjas le dan arroz con “arraclaus”, a las
gambas las llamaba “arraclaus”!.
El pobre José estuvo en la residencia cuatro o
cinco años y murió, desde aquí pienso que todos que lo provocábamos, lo
recordamos con mucho cariño. Toño
Claro, pobre hombre, no habría visto nunca en una gamba en su vida !! y si te descuidas igual no habría comido nunca una paella...
ResponderEliminarAy que ver, si nos ponemos a pensar qué afortunados somos ahora con la de manjares que tenemos, y las penurias que han pasado nuestros padres y abuelos...pobre gente.
Efectivamente fue el Padre Matías quien se preocupó de conseguir una plaza para José en el Hospital Psiquiátrico de Sant Boi que él dirigía por aquellos años, en la unidad de geriatría. Aquí le llamaban José "el Urrea" porque el nombre de nuestro pueblo no se le caía de la boca. Aparte de "los "arraclaus en el arroz" que refiere Toño, lo que peor llevaba en la vida institucional era la obligación de la ducha. Cuando le tocaba se le oía gritar por todo el edificio: "A la LUCHA, NO!". Tambien he oído contar que cuando en los últimos momentos le iban a administrar el sacramento de la unción,ante la invocación del sacerdote "Ven Espíritu Santo", él susurró. "El Espíritu Santo ese no, que venga mi sobrino el Manolo". Genio y figura... RAMON, desde San Juan de Dios de Sant Boi
ResponderEliminarHablando con mi madre sobre ésta publicación me enteré que este señor era hermano de mi abuela Carmen,( la madre de mi madre), y por lo que cuenta Ramón de que llamaba a su sobrino Manolo, efectivamente era mi tio Manolo hermano de mi madre, que falleció este verano pasado.
ResponderEliminar